sábado, 9 de enero de 2010

Se abre el telón...

Pienso, luego existo.

René Descartes



Saludos al desdichado que haya caído en mis redes ya sea por accidente o por embauco. Le advierto que esta bitácora tiene por objeto dar salida a las dudas y paranoias que pululan por mi mente. Éste será sólo un lugar donde plasmarlas y comunicárselas al mundo. También procuraré compartir con aquel que se pase, aquel material diverso que me parezca de interés. Este lapso de mi vida va dedicado a aquel que se encuentre tan perdido como yo en algún momento de la suya. Podrá así comprobar que no es el único y que existe alguien quizás tan loco como él si no más. Espero que algo de lo que llegue a escribir le sirva en algún momento. Si logro provocar dudas o motivar una revisión sobre lo que mi lector piense -aunque sea para que al minuto me rechace y me maldiga-, para mí habrá merecido la pena el tiempo que nos hayamos dedicado.

No prometo publicar cada día. Es más, odio las promesas. Quizás algún día hable sobre el tema. Tampoco deseo que este rincón se convierta en una "obligación" ni para mí, ni para nadie más. Cuando tenga que hacer, haré ,ya sea por placer o por necesidad. Eso mismo le pido a quien alguna vez me visite: Por favor, no lo haga regularmente, sólo por placer o por necesidad, mejor incluso si se da sin motivo. Y tranquilos, quizás sólo yo resulte ser mi propio lector. Pero, como dije al principio, si esto me sirve de ayuda, el espacio habrá merecido la pena.

En fin, dejo ya de dar el tostón para retirarme a mis aposentos a dormir aprovechando que aun estoy de vacaciones. El significado de la cabecera del blog se irá desvelando conforme vaya desnudando a este tedioso ser que se referirá a sí mismo como Sandunguero desde este momento.

Un placer ocupar algunos minutos de sus vidas, agradeceré que ustedes también lleguen a ocupar algunos de la mía.

Tras todo esto, sólo queda decir: Pasen y vean :)


Sandunguero